En la posada del fracaso, donde no hay consuelo ni ascensor, el desamparo y la humedad comparten colchón. Y cuando por la calle pasa la vida como un huracán,el hombre del traje gris saca un sucio calendario delbolsillo y grita: ¿Quién me ha robado el mes de abril? Pero.. ¿Cómo pudo sucederme a mí?
